lunes, 29 de febrero de 2016

High School DxD - Vol 10 - Nueva vida

Vamos viendo los últimos coletazos de la décima novela, aunque aún queda un capítulo extra



Nueva Vida

Parte 1

“¡Por favor, poneos en fila!”

Asia, que llevaba puesto un traje de camarera muy mono, hizo que los estudiantes formasen una fila en el pasillo. La fila que había para entrar en la cafetería era enorme.

“Sí~, esta es la zona de clarividencia y purificación. Toujou Koneko-chan y Himejima Akeno-senpai se ocuparán de predecir vuestro futuro y de purificar vuestras almas.”

Irina estaba al lado de la cafetería y se ocupaba de promocionar las distintas actividades que llevábamos a cabo.

¡La serie de actividades que preparó el club de ocultismo para el festival cultural por todo el edificio antiguo fue todo un éxito! No sólo lo dijeron los tíos, que vinieron por ver a las chicas de nuestro club, sino que muchas chicas también pensaban lo mismo. Incluso algunos de los vecinos que se acercaron también lo dijeron. Tío, ¡las chicas de nuestro club eran super populares!

“Sonreíiid.”

La foto se la estaban haciendo a Buchou, con su traje de camarera.

La actividad en la que podías hacerte una foto con algún miembro del club también fue muy popular. Muchos visitaron la actividad para hacerse una foto con el miembro del club que quisieran. Bueno, lo cierto es que nadie quiso una foto conmigo… Después de todo, ¡no era más que un estudiante pervertido!

Pero hablando de todo un poco, ¡ver a Buchou con su disfraz de camarera era tan maravilloso que me daban hasta ganas de llorar! Claro, Buchou también participó en lo de las fotos.

“Ise-kun, deja de mirar al infinito y échame una mano.”

Me dijo Kiba mientras entraba en el aula en el que habíamos montado la casa encantada. Sí, ahora me tocaba hacer de Frankenstein en “La mansión abandonada”. Hasta me había maquillado para que fuera más creíble. Gasper hacía de Drácula, aunque más que miedo lo que provocaba era ternura de lo mono que estaba.

“Tengo que ir a echar una mano a la cafetería, te dejo a cargo de la trampa.”

“Sí, sí.”

Estaba genial que todo lo que habíamos preparado fuera tan popular, pero al final teníamos que estar echando una mano en todos lados. En cuanto sacábamos un rato libre, íbamos a ver donde podíamos ayudar.

Bueno, ahora me toca centrarme en mi labor como Frankenstein. Oh, ¡han entrado unas chicas!

“¡Gaaah!”

Intenté asustarlas apareciendo de repente, pero…

“¡Kyaaaah! ¡Es el Pervertido! ¡Hyoudou! ¡Nos va a violar!”

¡PLAS!

Me dieron una bofetada.

“Waaa~ Soy Drácula y voy a morderos~”

“¡Kyaaah! ¡Gasper-kun es taaaaan mono!”

Parece que la versión de Drácula de Gasper era muy popular entre las mujeres… ¡Mierda!

“Ah, ¡ahí está Hyoudou! ¡Matadle antes de que nos haga algo!”

¡PLAS!

Otra visitante que decidió darme una bofetada. ¡Esta vez ni siquiera tuve tiempo de intentar asustarlas!

¿Por qué sólo a mí…?

Con esta ya eran diez las bofetadas injustas que me había llevado hoy.


Parte 2

“No puede ser… ¿Todos los Demonios de clase alta le han retirado su apoyo a Sairaorg-san?”

Estaba aprovechando mi tiempo libre para hablar con Sensei al lado de la taquilla de venta de entradas del primer piso.

Estábamos hablando de Sairaorg-san.

Sairaorg-san había perdido todos los contactos que había hecho para garantizar su posición tras perder contra nuestro grupo.

“Sí, eso es. No son del tipo de personas que seguirán mostrándole su apoyo y confianza a un perdedor. ¿No te he dicho nunca que los Demonios siempre se rigen por principios lógicos? Si algo no merece la pena, simplemente se desecha.”

¡Eso era cruel! En serio iban a abandonarle de esa manera…

“…Después de la magnífica lucha que tuvimos…”

“No tienes nada de lo que arrepentirte, ¿vale? No deberías preocuparte por alguien que ha sido capaz de luchar toda su vida utilizando sólo sus puños. Te llevaste la mejor parte. Ese es el mundo de los Demonios. Un mundo en el que lo único que se valora es la fuerza. Si vas a introducirte en ese mundo, Rias y tú necesitáis aclaraos las ideas.”

“¿Y su cargo como heredero de la casa del Gran Rey?”

“Eso aún no ha cambiado. No sé qué es lo que hará la Casa del Gran Rey, pero aunque no posea el poder de la destrucción sigue siendo alguien con un poder considerable. No pueden limitarse a deponerle sin más, porque eso también despertaría comentarios en la sociedad de los Demonios.”

Ya veo, así que no le han retirado su puesto como heredero de la Casa del Gran Rey. Me sentí aliviado al escuchar eso.

Ganamos…  Conseguimos la victoria en los juegos de los Demonios jóvenes.

Lo que conseguimos fue algo grande, pero igualmente, los que perdieron, perdieron algo importante.

¿Así era el mundo de los Demonios…?

Ah, sí. Había algo que quería decirle a Sensei.

“Sensei, he pensado en algo… aunque esta vez no he podido probarlo antes.”

“El Artefacto Sagrado de Kiba… ¿Tiene algo que ver con su nuevo Balance Breaker?”

“Sí. Yo también tengo el poder que conseguí en aquella ocasión… el poder del Hakuryuukou, así que quizás…”

Sí, pensaba que eso también me sería posible a mí. De hecho, fui capaz de hablar con uno de los senpai de Albión durante mi último combate.

“…Eso es algo totalmente contrapuesto a tu habilidad. Es cierto que puedes utilizar el poder de dividir algo, pero especializarte en ello puede poner tu vida en peligro. Y si lo usaras, no podrías utilizar los poderes del Sekiryuutei.”

El Artefacto Sagrado respondía a la voluntad y los sentimientos de su portador. Así que al final todo se reduciría a lo duro que entrenase y lo fuerte que fuera mi imaginación, ¿eh? No sería de mucha utilidad si no podía usar  los poderes del Sekiryuutei mientras usara los del Hakuryuukou, pero lo mismo le ocurría a Kiba con su nueva técnica. Quizá fuera capaz de hacer algo al respecto si pensaba lo suficiente en ello.

También podía utilizarlo como una especialidad. Pero… ¿sería capaz de hacer algo así? No estaba muy seguro de ello, pero Kiba fue capaz de crear una especialidad de su Balance Breaker, así que estaba claro que era posible. ¡Tenía muchas ganas de volver a entrenar con Kiba!

“Simplemente trabaja en ello mientras perfeccionas tu nueva forma de ‘Reina’. Parece que aún tienes mucho espacio para crecer.”

Sí, todo empezaba ahora. La puerta estaba abierta y lo que estaba dentro iba saliendo poco a poco. ¡Tenía que seguir intentando darle forma a todo lo que podía hacer ahora!

Cuando estaba pensando en ello, aparecieron esos idiotas de Matsuda y Motohama.

“¡Oye, Ise! ¡No podemos entrar en ninguna de las actividades!”

“Mierda… ¡La zona de adivinación, la de purificación y la cafetería tienen una fila larguísima! Ise, somos amigos, ¿no? ¿No podrías darnos una especie de pase VIP o algo?”

Los dos se me acercaron más.

Sí, lo cierto es que todas las actividades del club de ocultismo estaban a tope. Las filas no se terminaban nunca. Como teníamos a todas esas preciosidades y al guaperas de Kiba era normal… Muchos chicos y chicas querían venir a verles.

En ese momento estaba vendiendo entradas. Todas las que había preparado se agotaron inmediatamente, aunque gracias al apoyo de Ravel empezamos a hacer más inmediatamente.

Sensei se marchó después de decirme “Esfuérzate al máximo”. Aunque se suponía que era nuestro supervisor, lo cierto es que lo único que hizo en todo el festival fue darse paseos y pasárselo bien.

“Ise-sama, ya están aquí las nuevas entradas.”

“Ah, gracias, Ravel.”

En el momento en el que quité el cartel de “entradas agotadas”, los visitantes vinieron en tropel gritando “¡Una entrada, por favor!”. ¿¡De dónde había salido tanta gente!?

“Sí, una para la sala de adivinación, ¿verdad?”

Bueno, Ravel parecía estar pasándoselo bien, así que todo iba genial.

“….Ise-sama.”

Me dijo Ravel mientras vendía las entradas.

“Vuestro combate me conmovió mucho… Cuando vi como abrazabas a tu oponente al final terminé llorando…”

Se estaba poniendo colorada. ¿P-Por qué se ponía así tan de repente…?

“S-Sí, jajajajaja. Me dejé llevar un poco… Cuando pienso en aquello me da un poco de vergüenza.”

“¡N-No tienes por qué! ¡Ya sé! ¡Luego haré una tarta o algo!”

“Oh, seguro que está buenísima. Estaré esperándola.”

Cuando dije aquello, Ravel se apoyó la mano en la barbilla y dijo muy cariñosamente.

“¡C-Claro! ¡Después de todo, va a ser una tarta especial!”

Sí, así es como pensaba que respondería Ravel.

Cuando quise darme cuenta, vi que habían llegado muchísimos más visitantes.

Ummm, ¿puede darme una entrada para el área de purificación?“

¡Ahora tenía que centrarme en vender entradas!

“Ise, ¿¡hay alguna tienda oculta o algo!?”

“Mi querido amigo, ¿¡dónde puedo ir a hacer fotos pervertidas!?”

Debería partirles la cara a Matsuda y Motohama.


Parte 3

“Así que el grupo de los Sirtri tuvisteis una ‘Lucha de Banderas’, ¿eh?”

“Sí. Tuvimos que correr por todo el campo de batalla… Todavía sigo cansado…”

Saji y yo estábamos hablando mientras dábamos una vuelta por el edificio en el que estaban las clases.

Parece que Saji estaba dando una vuelta por ahí para ver cómo iba todo, ya que era parte de su trabajo como miembro del consejo de estudiantes, y al final terminó encontrándonos a Koneko-chan y a mí, que aprovechamos un rato libre para ir a ver un par de puestos y tiendas.

Cuando quisimos darnos cuenta, estábamos hablando de nuestros Rating Game.

Parecía que el combate que tuvieron los Sirtri contra los Agares mientras nosotros nos enfrentábamos a los Bael se centró en arrebatarle la bandera a sus oponentes.

“Parece que las reglas del ‘Dado Cargado’ también fueron duras, Hyoudou.”

“Sí. No tuvimos que correr mucho, pero el problema era decidir a quién enviar en cada combate. Tío, los Rating Game son muy duros.”

El sueño del grupo de los Sirtri era construir un instituto de Rating Game en el Inframundo, y Saji quería ser uno de sus profesores. Bueno, tampoco era algo sencillo de conseguir.

“¿Y el resultado?”

Le pregunté a Saji cuando salimos del edificio y me disponía a comprar un perrito caliente en un puesto.

“Ganamos por un margen muy pequeño. Como el combate consistía en arrebatarle la bandera a los rivales tampoco era necesario ser muy fuerte. Pero al final terminé liberando mi forma de Rey Dragón y perdí el control… Dejé el campo de batalla en un estado lamentable y dijeron que eso habría bajado nuestra valoración… Aaaah, no hago más que causarle problemas a Kaichou…”

Saji se arrodilló en el suelo mientras inclinaba su cabeza.

Ah, así que perdiste el control. Como no estaba yo para controlarle, tuvo que ser duro detenerle en ese estado si encima se sentía acorralado.

“Haaa… No puedo utilizar mi forma de Rey Dragón si no está Hyoudou… ¡Aaaaah! ¡Ese tío…! ¿¡No está claro que no puede pisarse ese jardín!? Perdona, Hyoudou.”

Diciendo aquello, Saji se fue corriendo hacia el estudiante que estaba pisando las flores. Trabaja muy duro.

“…Senpai, vamos a ese puesto de tiro.”

Me dijo Koneko-chan mientras me tiraba de la pierna. Sí, sí, vamos.

“Vale, Koneko-chan. Si me ganas te compraré algo.”

“….Recuerda esas palabras. No voy a contenerme.”

Bueno, al final terminé perdiendo de paliza contra Koneko-chan y terminé comprándole un montón de cosas…


Parte 4

El festival cultural estaba llegando a su final y había hogueras por todo el patio. Ahora mismo, ¡había un montón de chicos y chicas bailando! De alguna manera, conseguí terminar de vender todas las entradas y volví agotado  a la sala del club. Aún no me había recuperado por completo de mi combate contra los Bael. Acababa de despertar mi forma de ‘Reina’ y aún tenía muchas lagunas que cubrir para extraer todo su potencial. Ddraig dijo que debía empezar a pulirlo desde ahí. Suponía que si conseguía acostumbrarme a utilizar mis formas de Triaina, eso repercutiría en el poder que desplegaba al usar la forma de ‘Reina’. Bueno, a partir de ahora me esforzaría en acostumbrarme a usar sus formas.

Ah, sí. Sirzechs-sama y Leviathan-sama también habían venido hoy. En cuanto aparecieron, Grayfia-san y Kaichou se los llevaron a rastras… Yo ahora estaba en la sala del club. No habíamos usado esta sala para ninguna actividad, así que estaba como siempre… Dentro había alguien. Estaba sentada en la silla en la que normalmente se sentaba Buchou. Era ella. Ya se había quitado su disfraz de camarera y llevaba el uniforme de la Academia, como siempre.

“Ise…”

Murmuró Buchou cuando me vio entrar.

“…Buen trabajo.”

“Ah, sí.”

“Como estoy en tercero, este será mi último año. Por eso quería estar aquí un rato.”

“Y-Ya veo…”

“…………”

“…………”

Buchou y yo nos quedamos en silencio. Después de aquella batalla, Buchou y yo estábamos un poco raros. Y claro, la razón era… que le confesé mis sentimientos delante de toda esa gente. Aún no me había dado ninguna respuesta. Hasta yo me sentía incómodo porque cada vez que nos veíamos nos pasaba lo mismo. Tío, ¡me daba tanta vergüenza cada vez que me acordaba de lo que hice! Aunque me dejara llevar, no me podía creer que hubiera gritado que la amaba. Al final terminó apareciendo hasta en los periódicos del Inframundo.

[¡El Dragón Oppai y la Princesa Interruptor! ¿¡Existe un verdadero romance bajo su relación de ama y sirviente!?]

Parecía que no íbamos a poder volver al Inframundo en un tiempo. Si lo hiciéramos, tendríamos a toda la prensa pendientes de nosotros. Hmmmm, eso sería un problema. Entonces recordé lo que me dijo Sairaorg-san.

“Entonces, ¿qué te parece si le confiesas tus sentimientos de nuevo?”

Bueno, ya no podía echarme atrás. Vamos, Ise. ¡Es verdad que amaba a esa mujer! Sólo tengo… que decírselo. ¡Iba a decírselo! Algo que llevaba mucho tiempo queriendo decirle. Tengo que ser capaz. ¡Iba a ser capaz de hacerlo! Tragué saliva, respiré profundamente y le dije con voz firme.

“R… Rias…”

“¿…………Eh?”

Buchou se quedó un rato en silencio antes de contestarme. ¡Jodeeeeeeeeer! ¡Pues se lo diré de nuevo!

“Yo… ¡Quiero protegerte, Rias! ¡Quiero hacerlo por el resto de mi vida! ¡Estoy enamorado de ti, Rias!”

“¡…!”

Buchou parecía haberse quedado sin palabras. Después, empezó a llorar. ¡Joder! ¡La he hecho llorar!

“¿H-He… dicho algo malo…?”

Me quedé pálido, pero Buchou negó con la cabeza.

“……No, no es eso. Es que… soy tan feliz…”

Buchou se me acercó y me acarició la mejilla.

“Al fin me has llamado por mi nombre… Llevo tanto tiempo esperando este momento… Sólo que no tenía el valor suficiente para decírtelo… así que pensé que nunca llegaría el momento… Pero cuando te escuché confesar todos tus sentimientos aquella vez… Estaba tan contenta… Tan feliz que parecía que iba a romper a llorar en medio del partido…”

No sabía ni qué cara poner después de escuchar aquello. ¡Eso quería decir que…!

“….Eso quiere decir que…”

Buchou asintió. ¿¡E-En serio…!? ¿¡Iba a convertirme en su…!?

“Ise, te amo… Te amo más de lo que nunca he querido a nadie…”

Los labios de Buchou… digo, de Rias, se acercaron a los míos.

“Rias…”

“Ise…”

Cuando estábamos a punto de besarnos.

¡BANG!

Escuchamos un ruido en la puerta.

“O-Oye, ¡no me empujes, Xenovia!”

Esa era la voz de Irina. Cuando miré, ¡vi que todos los miembros del club estaban espiando desde la puerta! ¿¡Nos estaban espiando!? ¿¡Habían visto lo que acababa de pasar!?

“¡F-Felicidades, Ise, Buchou! ¡Sabía que no me equivocaba con vosotros dos!”

Dijo Xenovia un poco tensa.

“U-Umm… enhorabuena. ¡Ahora puedo seguir los pasos de Onee-sama!”

¿¡Tú también estabas mirando, Asia!?

“Vaya, vaya. Ahora sí que pudo tener una aventura de verdad con Ise-kun.”

¡Hasta Akeno-san!

“…Ahora es cuando empieza lo mejor, ¿no?”

¿¡A qué se refería Koneko-chan!?

“Lo siento, pero yo también lo vi.”

“¡Estoy tan emocionado!”

¿¡Incluso Kiba y Gya-suke!? No me jodas…

“Puedo pasar por alto una relación sexual ilícita por hoy, ¿vale?”

¡Esto no es asunto tuyo, Rossweisse-san! Quiero decir, ¿no se supone que eres una profesora?

“¡He pedido que me dejen una de las cocinas, así que al final he podido hacer un pastel!”

Ravel entró en la sala del club con un pastel enorme. Se ve que era la única que no estaba espiándonos…

“¿Eh? ¿Me he perdido algo?”

Ravel se nos quedó mirando sin entender lo que estaba pasando. Rias, que estaba a mi lado, estaba temblando.

“¡Jo! ¡Chicos! ¡Se suponía que esto iba a ser uno de los momentos más importantes de mi vida! ¿Y ahora qué hacemos? ¡Es culpa tuya, Ise! ¡Todo esto ha pasado porque te me has declarado aquí!”

“¿Eh? ¿Es culpa mía?”

“Síiiiiii”

¡Todos parecían estar de acuerdo con ella! ¡Chorradas!


Y con esto se acabó el festival cultural y la lucha contra Sairaorg-san. Terminado. Ahora… Bueno, veamos cuánto tiempo dura mi confesión…

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